Después de año y medio desde que Federico Gutiérrez terminó su mandato como Alcalde de Medellín, sus aspiraciones a la Presidencia se han hecho evidentes y ha utilizado sus redes sociales para buscar protagonismo y enviar mensajes sobre lo que considera debe ser y hacer un buen gobernante, cazado peleas con la oposición y ha utilizando esas trincheras para agudizar las crisis.
Lo que quizás “Fico” olvida es que en sus cuatro años de gobierno en Medellín, su gestión sobresalió por escándalos, especialmente asociados a la seguridad, su tema bandera, y también olvida que su imagen es consecuencia de gastos excesivos en publicidad, como lo mostró un informe de la FLIP y a su tan conocida bodega, esa que se dedicó a atacar, estigmatizar y lapidar contrincantes, la misma, que según información conocida, se ha vuelto a activar.
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Dicha bodega, en su momento, consistía en una serie de perfiles falsos creados para defender la gestión del exalcalde y del expresidente Uribe, además para atacar a opositores. Detrás de esto estaba Mateo Gómez Vahos, estratega de redes sociales del entonces alcalde Federico Gutiérrez. Los perfiles, manejaban el mismo lenguaje y tono, incluso, cuando se trataba de montar tendencias se encontraban varios tweets exactamente iguales.
Como píldoras para la memoria, categorizamos sus logros en seguridad, esos que lo hacen salir a decir cómo se debe manejar el orden público y las ciudades, especialmente en momentos de grandes tensiones como la vivida en el paro:
Primero, la captura de su Secretario de Seguridad: esta historia se desarrolló en julio de 2017, fue detenido Gustavo Villegas, Secretario de Seguridad de Federico Gutierréz, por entregar información privilegiada a temidos cabecillas del crimen organizado, según declaraciones entregadas a medios locales por Claudia Carrasquilla, directora seccional de Fiscalías de Medellín en ese entonces. Es inexplicable como la persona encargada de la seguridad y vida de todos los medellinenses, estaba vinculada y sumergida directamente con cabecillas de grupos criminales. El Alcalde puso al ratón a cuidar el queso.
Segundo, el vecino de Fico resultó ser nada más y nada menos que alias “Reseco”, Juan Pablo Úsuga Torres, jefe del Clan del Golfo, quien fue capturado, después de vivir durante ocho meses a pocos pasos de Federico Gutiérrez, un hecho bastante paradójico si tenemos en cuenta que su compromiso siempre fue erradicar el crimen organizado, prácticamente dormía con el enemigo.
Tercero, en 2016, en la comuna 16 (Belén), 12 hombres encapuchados interceptaron un bus alimentador del Metro de Medellín, obligaron a que el conductor se bajara, para después incinerar el vehículo. La noche anterior, los habitantes de la zona escucharon por más de media hora disparos de fusiles y metralletas, y sus casas amanecieron pintadas con mensajes alusivos al clan Úsuga.
Y cuarto, incumplió con la meta de campaña de bajar homicidios, pues planteaba para el plan de desarrollo 2016-2019 una reducción concreta de 5 puntos respecto a la tasa de 20,5 entregada por Aníbal Gaviria en 2015. Sin embargo, de acuerdo con el informe del viernes 13 de diciembre de 2019 del Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (SISC), la tasa de homicidios se acercaba a los 23 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Gutiérrez basó su Alcaldía y sus estrategias de comunicación en el discurso de la seguridad y reducción de los homicidios, cosas que no logró. Basó en capturas sus actuaciones mediáticas, lo cual lo llevó a equivocarse capturando personas que eran inocentes, y terminó acusando a la justicia de no actuar bien cuándo los procedimientos no se hacían apegados a la ley.
En este sentido, el 9 de Agosto de 2017 se emitió un comunicado, recordando la captura del Secretario de Seguridad, en el que señaló que “Y al mismo Alcalde Federico Gutiérrez le puede pasar lo mismo si sigue haciendo operativos y capturando personas sin el debido proceso, como acostumbra hacerlo. Eso lo podía hacer el sheriff en el oeste, pero aquí en Colombia hay un ordenamiento jurídico al cual todos nos debemos someter”
Esto comprobaría el sin sabor de muchos Medellinenses y políticos cercanos a Federico Gutiérrez referente a su gestión como mandatario de Medellín. Fico, quien espera llegar a la casa de Nariño con promesas de seguridad, quizás podría está vez gobernar con algunos buenos muchachos, esos con los que el Uribismo acostumbra a trabajar y tan rodeados de tragedias familiares, como ocurre con la vice presidenta y canciller y tantos otros.
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