En esta oportunidad traemos de nuevo la historia escrita por Sinpro, uno de los sindicatos de EPM, quienes denunciaron la puerta giratoria entre EPM y el GEA.
Pero, ¿quién es Sinpro?, ¿en qué consiste la puerta giratoria? Pues bien, vamos a responder esas preguntas.
SINPRO es el sindicato de profesionales de EPM y UNE, que, según el sitio web, agrupa “más de 4.700 afiliados vinculados; los cuales desempeñan labores u oficios de tipo profesional, técnico o tecnológico” que “basados en el concepto de Responsabilidad Social Sindical y como promotores de un Nuevo Sindicalismo en Colombia, no sólo trabajamos por el bienestar de nuestros afiliados sino por el de los grupos de interés” .
En 2015 Sinpro, denunció públicamente que los grupos privados intentaban privatizar EPM y que entre las empresas del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) y la empresa pública más importante de los antioqueños existía un modelo de promoción en el que los ejecutivos pasaban entre estas empresas con singular facilidad, a esto le llamaron “la puerta giratoria”.
Y aunque, apenas surgió la ‘preocupación’ pública de algunos sectores por EPM, los hechos datan de varios años atrás y Sinpro de manera magistral lo había relatado; y aunque lo bajaron de su sitio web quedó replicado en otros portales por la importancia de su contenido.
En Medellín si ha existido un intento de toma hostil a EPM
En Medellín si ha existido un intento de toma hostil a EPM. Esta ha sido por parte de algunos empresarios, políticos e interesados económicos. Esto ha sido un paso a paso fríamente calculado que tiene sus primeros pilares alrededor de 1997, pasando por diferentes gobiernos, gerentes y juntas directivas.
En 1997 en el concejo municipal de Medellín, no cedió ante los intentos de privatización de Empresas Públicas de Medellín, y por el contrario dejó plasmado en el Acuerdo 069 la transformación de EPM en una Empresa Industrial y Comercial del Estado, propiedad 100% del Municipio de Medellín, y estableció su forma de administración y el porcentaje de las transferencias, pues desde la primera partida presupuestal en 1955, la ciudad no ha destinado más dinero para la empresa, es autónoma y ha devuelto multiplicada esa inversión tanto con cobertura, calidad y eficiencia en la prestación de servicios públicos, como en transferencias al Municipio.
Sin embargo, en 2004, cuando Juan Felipe Gaviria Gutierrez era el gerente volvió a ponerse sobre la mesa el debate sobre la privatización y se contrató la costosa consultoría de la firma Teletraining, la cual entre otras cosas sugirió que “era necesario escindir el negocio de las telecomunicaciones”. Así nació UNE y años más tarde, en 2013, se dio la llamada fusión UNE-Millicom, con resultados negativos para las finanzas de EPM.
- BONUS: En una reunión entre SINPRO y el Gerente de EPM, Juan Felipe Gaviria y cuando se planteaba la escisión de las telecomunicaciones, expresó: «No se preocupen aún por la privatización de EPM. El que va a privatizar a EPM apenas está estudiando en EAFIT”.
Fue entonces, como desde esa época y con Juan Felipe Gaviria como protagonista que, con el argumento de proteger a EPM de la politiquería se empezó a permear la Junta Directiva y algunos cargos administrativos por los privados con la complacencia de los alcaldes y gerentes de turno.
Malos negocios de EPM, buenos negocios de empresas privadas
Según lo relató Sinpro en aquel artículo: “a partir de allí se dieron los pésimos negocios de Orbitel, Colombia Móvil y TigoUNE; el inicio del programa “Grupo EPM Sin Fronteras”; las inversiones de EPM en el exterior; la prevalencia de los resultados financieros a costas de los social; la creación del “Conglomerado Público de Medellín”; los proyectos de ley para modificar el objeto social de las empresas de servicios públicos; y la puerta giratoria entre directivos y altos ejecutivos de EPM, el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) y otras empresas privadas con intereses en EPM”
Sobre este punto son varios los ejemplos del desfalco y el uso de los recursos de EPM como caja menor de empresas privadas en las administraciones de Fajardo y Gutierrez. La contraloría de Medellín encontró que EPM pagó mucho más de lo que costaba la compañía, basados en dos estudios, uno de la firma Signals Telecom Consulting, que arrojó que el valor de Orbitel era de 33,1 millones de dólares, es decir 51,9 millones menos de lo que EPM pagó.
Además la empresa arrojó pérdidas por 11.860 millones de pesos al momento en que la Contraloría decidió hacer el estudio. Es decir, además de pagar más, EPM también asumió las pérdidas que presentaba Orbitel y de las cuales se salvaron Valorem y la Organización Sarmiento Angulo, dueños del 50% de la compañía.
Otros ejemplos, en las inversiones de México, realizadas en 2013, EPM perdió, a corte de septiembre de 2020, alrededor de 72,7 millones de dólares, equivalentes en pesos colombianos a unos 263.000 millones de pesos, lo que quiere decir que ocho años después la inversión no ha tenido retorno y, por el contrario, se generan cifras tan negativas.
Hay más, en la inversión realizada en 2003 con la hidroeléctrica Bonyic de Panamá, la cuál debió construirse en 36 meses por un valor de 50 millones de dólares. El proyecto pasó de su presupuesto inicial a tomarse 11 años para su construcción y que su costo ascendiera a 314 millones de dólares, sextuplicando el valor inicialmente planteado.
Hay que recordar que en 2007 el entonces Alcalde, Sergio Fajardo y el gerente Juan Felipe Gaviria, firman el “Convenio Marco de Relaciones Municipio de Medellín – EPM” que obliga hoy al Municipio de Medellín (Alcaldía y Concejo) a respetar la autonomía administrativa de EPM, señalando, entre otros, que se mantengan al menos cinco miembros independientes, de los nueve de la Junta Directiva; con esto se hizo más evidente la injerencia e interés de los privados por apropiarse de EPM.
¿Y por qué el marco expone la autonomía y el carácter público de Empresas Públicas de Medellín?
Porque era como poner a un ratón a cuidar el queso… aunque los miembros independientes de la Junta Directiva de EPM cumplían los requisitos de la ley 964 de 2005, muchos de los miembros que por años estuvieron en ella tenían intereses en los negocios de la empresa o incluso eran competidores directos de Empresas Públicas de Medellín en el negocio de la energía.
Al respecto Sinpro enfatizó: “basta dar una simple ojeada para ver que no hay tal independencia: tres provienen del sector privado; uno es vicepresidente de una empresa del GEA (Andrés Bernal Correa, Protección) y otro, hasta hace unos meses, era Presidente de una de ellas (Carlos Raúl Yepes Mejía, Bancolombia); cabe señalar que el GEA, con Celsia (EPSA) es competidor directo de EPM en el negocio de energía.
Hay más. En la Junta Directiva de lo que queda de UNE EPM Telecomunicaciones S.A., donde en el papel EPM tiene el 50% más una acción, también tiene asiento un miembro del GEA (Miguel Moreno Múnera, Nutresa). Eso sin contar con que el actual Director de Comfama (David Escobar Arango), la caja de los empresarios privados, fue Vicepresidente de UNE, donde el esposo de la anterior Directora de Comfama (Federico Arango Toro) hace parte de la Junta de UNE como representante de EPM. La fiesta del yo con yo.”
La toma hostil de EPM no era solo por la intromisión de privados con intereses empresariales
La toma hostil de EPM no era solo por la intromisión de privados con claros intereses personales y empresariales, sino que además se presentaron varios casos de promoción entre empresas del Grupo Empresarial Antioqueño y Empresas Públicas de Medellín, funcionando una y otra como un trampolín para pasar de cargos entre una y otra… una puerta giratoria, en la que de un lado estaba EPM y en el otro las empresas del GEA.
Casos concretos citados por Sinpro fueron: “Juan Esteban Calle, responsable de la falta de solidez y pérdida de credibilidad actual de EPM, se fue a gerenciar a Cementos Argos, uno de los principales proveedores de EPM; Federico Restrepo Posada cuando salió de EPM y antes de ser candidato a la Gobernación de Antioquia llegó a la compañía de financiamiento Tuya, de propiedad del GEA; y el propio Juan Felipe Gaviria siguió asesorando a Conconcreto y a Construcciones El Cóndor, contratistas con grandes intereses en EPM. Adicionalmente, Esteban Iriarte, expresidente de UNE y miembro actual de la Junta de esa empresa, se vinculó a la de Sura Asset Management S.A., una compañía de pensiones, ahorro e inversiones adscrita al GEA, de la cual es vicepresidente un miembro de la Junta de EPM. Una telaraña de los mismos con las mismas.”
La estrategia de financiar campañas para que, una vez elegidos, devuelvan el favor
La estrategia fue muy clara desde el principio, una de las más antiguas y clásicas en la política para quedarse con los recursos públicos. Las empresas financian y patrocinan las campañas políticas de los alcaldes y gobernadores, asegurándose que quienes lleguen al poder sean de fácil dominio para ellos, garantizando que sólo tendrán las cuentas bancarias del municipio o departamento en Bancolombia, al igual que los empréstitos, sólo podrán adquirir seguros de Sura, comprar cemento en Argos y se le sumaría toda contratación pública en la que pudieran estar interesados, adicionando burocracia desmedida. Todo esto lo asegura el ex procurador General de la Nación José León Jaramillo Jaramillo.
De esta forma también han ingresado, poco a poco, a la administración de EPM, al parecer, para “reventarla financieramente, para llegar como salvadores y comprarla bien barata”. Hubo un tiempo donde Emvarias ( Del grupo EPM) tenía sus vehículos en el modelos de renting con Bancolombia. ¿Coincidencia?
Acá vienen más coincidencias que no son casuales. Y como todos lo saben, las empresas no hacen inversión sin tener un cálculo económico a futuro donde salgan ganando. El GEA y otras empresas privadas han hecho millonarios aportes a la mayoría de campañas de candidatos a la alcaldía. En el 2015 sobrepasó los $500 millones de acuerdo con las cuentas públicas. Dentro de los candidatos que han recibido este tipo de financiación están Sergio Fajardo, Alonso Salazar y Aníbal Gaviria. Y recordemos que es el alcalde quien ejerce como presidente en la Junta Directiva de EPM.
El anterior alcalde, Federico Gutierrez, recibió millonarias donaciones de las fundaciones Celsía y Bancolombia, de Protección, Cementos ARGOS, Crystal S.A.S y Sator S.A.S (Argos). Y después de electo, Federico Gutiérrez guardó silencio ante acontecimientos como los despidos de trabajadores de UNE y la venta parcial de la parte operativa de la empresa a Huawei. Al mismo tiempo, tuvo el mayor escándalo de todos con la emergencia de Hidroituango, donde están involucradas empresas del GEA.
El artículo escrito por Sinpro, es una clara muestra del modelo que por años utilizaron para financiarse, para ganar unos pocos, para taparse entre ellos y para tener un modelo de ciudad en el que, con la excusa, del triángulo exitoso ganaron solo los mismos con los mismos y que, los ha hecho que hoy esos mismos personajes y empresas se sientan en riesgo, cuando se les destruyó su ‘jugadita’ maestra para desangrar al Estado.
Y para refrescar la memoria cerramos con lo dicho por SINPRO muchas veces.
Desde SINPRO seguiremos vigilando, trabajando y aportando para que EPM siga, efectivamente, siendo el ente autónomo que fue soñado por sus fundadores.
SINPRO
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