Una de las características de los precandidatos de derecha es que se pelean por llamarse centro y querer aparecer como la única alternativa. Eso parece ser lo que está pasando entre Federico Gutiérrez y Alejandro Gaviria, quienes desde este miércoles han difundido videos en los que se atacan mutuamente y se señalan de ser de derecha o de centro, según corresponda.
La primera pulla correspondió a Alejandro Gaviria quien en una aparición pública por redes sociales aseguró que Gutiérrez se estaba alineando más a la derecha desde hace una días atrás y que eso limitaría las posibilidades de una alianza de cara a las elecciones de 2022, además aseguró que ya no era el mismo Fico de antes y que había cambiado, frases que bien podrían ser atribuidas a dos amigos del alma que no se hablan desde hace meses.
Gaviria no es el dueño del Centro ¿y Fico si es el dueño de la derecha uribista?
Fico no tardó en responder y dijo que Gaviria no es el dueño del Centro, – otra frase trillada que ya ha sido pronunciada por otros “pre”- y que no es con discursos de descalificación como se va a construir un país diferente. –otra copia de su par mechudo-.
El tercer round fue para Gaviria, que le respondió a Fico diciendo casi lo mismo que había dicho este en su respuesta. Así no se construye el “centro” y “el centro es el único que puede salvar al país”, acusando entre líneas a Fico de ser el candidato de la Derecha, – otro secreto a voces”
Sin embargo, en la pelea de la derecha quién más se sigue acercando al Centro Democrático sigue siendo Federico Gutiérrez quien recibió alabanzas del político y columnista Jaime Arizabaleta que calificó la intervención de Fico como “una peinada” e invito a replicarla. Con Fico todos los caminos conducen al CD.
Lo cierto es que estas pseudo-peleas están a la orden del día, al final los dos “pre” representan a la misma derecha política, la misma clase empresarial y las mismas familias de siempre. Nada raro sería que se estén inventando las peleas para engañar a los incautos haciéndose pasar por diferentes.
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